La combinación entre música grabada y música en directo jugó un papel significativo en la música electrónica desde sus orígenes y ganó una importancia considerable durante la década de 1960. Los compositores se han interesado por fundir los sonidos producidos en un laboratorio con la experiencia tradicional de la interpretación en una sala de conciertos con instrumentos tradicionales. Antonio Mateu presenta una panorámica de música para saxofón con acompañamiento electrónico que intenta ofrecer, con la heterogeneidad de tendencias y personalidades musicales representadas, un abanico muy amplio de posibilidades sonoras.