En Francia hace años le dijeron que era el mejor músico de jazz europeo, pero afortunadamente aquí ya lo sabíamos desde hacía tiempo. Más allá de sus fructíferas y estrechas colaboraciones con gigantes como Camarón, Morente, Paco de Lucía o Chick Corea, el saxofonista y flautista Jorge Pardo es el responsable de la modernidad del jazz en nuestro país, un francotirador creativo que ataca todos los flancos artísticos, siempre con la emoción y la verdad por delante. Visita este ciclo con un cuarteto que no suele verse, el integrado por ese pianista intelectual que es Albert Sanz, el contrabajista Pablo Martín Caminero y el baterista Dani Domínguez: Puro Gatopardo lo ha llamado; será por Gato Barbieri, seguro por puro y por gato.