Tradición y presente de la música alemana
El Romanticismo alemán descubrió la concentración expresiva de la pieza breve pero no dejó de contemplar las grandes formas clásicas como ideales supremos a seguir. “Fantasía” era el título original del primer movimiento del Concierto para piano al que Schumann en segunda instancia dotó de un equilibrio más clásico. En su Tercera sinfonía Brahms deja atrás la sombra de Beethoven y levanta un edificio sonoro que encierra a la vez energía y melancolía. Aria para cuerdas de Jörg Widmann contempla el sinfonismo clásico desde la perspectiva posmoderna del siglo XXI.