Varias piezas de Widmann y el KV 581 de Mozart conforman esta segunda cita con el solista alemán y el Cuarteto Hagen, este último poseedor de numerosos e importantes premios obtenidos a lo largo de su fructífera carrera, entre ellos un Diapasón de Oro. Al margen de las obras en sí, la calidad musical será pues el distintivo de esta velada con cinco músicos de excepción que se despedirán del público madrileño con una de las páginas más hermosas de la historia de la música universal: “sublime unidad temática de lo heterogéneo”. Así resume Schoenberg las cualidades del Quinteto en la mayor de Mozart.